El Gobierno ha vetado, a través de la Mesa del Congreso, una enmienda presentada ayer por el PP a la Ley de Navegación Aérea para abonar a las aerolíneas 1.200 millones de euros que se adeudan por el descuento al residente y que permitirían poner el contador a cero.
Como se recordará, los presupuestos del Estado -que este año se prorrogan, contemplan 560 millones de euros para cubrir el 75% de descuento al residente en Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla. Sin embargo, debido al aumento de la conectividad y de los viajes el coste anual ronda los 1.500 millones de euros, con lo que existe un déficit evidente. Con los 1.200 millones que proponía el PP se cubre lo que está pendiente de 2024 (425 millones) y los primeros meses de este año, según fuentes próximas.
Como se recordará, el PSOE y CC lograron incluir una enmienda a la Ley de Navegación Aérea por 319 millones de euros, cantidad que es insuficiente y no soluciona el problema, como indicó tras su aprobación la Asociación de Líneas Aéreas (ALA). Además se estima que este dinero no llegue a las compañías aéreas hasta después del verano. Las aerolíneas han lanzado un SOS ante la situación de asfixia financiera que sufren y han advertido de que si los pagos no se producen con celeridad se verán obligadas a recortar rutas o frecuencias, con el impacto que esto tendrá para la conectividad de los canarios.
Fuentes próximas, indican que la deuda que mantiene el Estado con Canarias no es con el Gobierno regional sino con los canarios, con los que se comprometió a una subvención del 75% del billete. Las aerolíneas adelantan ese dinero y esperan para poder cobrarlo.
Las aerolíneas son meros intermediarios que se encargan de la ejecución del programa, actuando como entidades colaboradoras de la Administración. Aplican la subvención en el billete del residente que, posteriormente, debe liquidar el Gobierno con cargo a los presupuestos.