Una red de traficantes sudamericanos, perfectamente organizados, se hacía pasar por agentes de Policía para colar droga en el aeropuerto de Barajas. El dinero conseguido, presuntamente, con la venta de los estupefacientes, se trasladaba posteriormente a Lanzarote para, desde Canarias, enviarlo a bancos fuera de Europa con el objetivo de blanquearlo. Una operación conjunta de la Guardia Civil y de la Policía Nacional ha desarticulado el grupo criminal. Una red de traficantes disfrazados de policías trasladaban dinero de Barajas a Lanzarote.
La banda, ha informado la Guardia Civil en un comunicado, y que recoge La Provincia, introducía cocaína en el aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas y sus miembros se disfrazaban de policías para pasar desapercibidos y recoger envíos de droga procedentes de Latinoamérica.
En la operación han sido arrestadas diez personas y se han intervenido 190 kilos de cocaína de gran pureza.
Todo comenzó en abril de 2024, cuando los agentes del instituto armado detuvieron a un hombre en las instalaciones aeroportuarias que portaba dos maletas con 52 kilos de cocaína de un vuelo de Santo Domingo (República Dominicana).
El sospechoso, sin embargo, no había llegado a España desde Santo Domingo, sino que había accedido al aeropuerto con la intención de tomar un vuelo con destino a Bilbao.
Esta operación confluyó con otra llevada a cabo por la Policía Nacional sobre los mismos investigados, y así siguieron las pesquisas de manera conjunta ambos Cuerpos.
Control de seguridad
Los agentes detectaron el ‘modus operandi’ de la organización: uno de los integrantes entraba en las terminales con un billete de bajo coste y, una vez pasado el control de seguridad, era guiado por otro miembro, caracterizado como un agente de Policía Judicial, que le acompañaba hasta la cinta de recogida de equipajes. Allí cogía las maletas que ocultaban la droga para salir finalmente de la zona.
Los investigadores vincularon este grupo criminal con siete envíos de droga desde Latinoamérica al aeropuerto de Barajas y, una vez avanzadas las pesquisas, detuvieron a cinco personas que se encargaban de sacar las maletas con la droga.
Asimismo, la organización captaba a mujeres jóvenes y en situación precaria en Madrid para que transportaran el dinero en efectivo de las operaciones en vuelos a Lanzarote. Desde allí, otro colaborador enviaba el dinero a bancos situados en países de fuera de la Unión Europea.
El grupo criminal también captaba a personas en situación de vulnerabilidad económica, a las que ofrecían importantes beneficios económicos, a los que también hacían pasar por policías para burlar los controles.
En noviembre de 2024, agentes de ambos Cuerpos detuvieron a otros cinco integrantes del grupo —cuatro hombres y una mujer— como presuntos autores de tráfico de drogas, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal.
En tres registros domiciliarios en San Sebastián de los Reyes, Torrejón de Ardoz (Madrid) y Lanzarote, los efectivos policiales incautaron de 150.000 euros en efectivo, un arma corta simulada, documentación, un monedero de criptomonedas, teléfonos y un chaleco y una placa que usaba uno de los acusados para identificarse como perito judicial.
La operación ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid y la Fiscalía Antidroga.
Una red de traficantes disfrazados de policías trasladaban dinero de Barajas a Lanzarote