Este 28 de agosto, se cumplen 30 años de existencia de la ‘Ruta Canaria’ de las pateras. Desde hace tiempo, este tipo de migración irregular se ha convertido en la más usada. Aunque a su vez con una tasa de mortalidad bastante elevada. 30 años de la ‘Ruta Canaria’
Existen varios momentos a lo largo de la historia, que marcan un antes y un después a esta forma de llegar tierras europeas por parte de lo migrantes. Todo comenzó en agosto de 1994, en el que dos jóvenes saharauis llegaron a la isla de Fuerteventura. Lo hacían en una barca de pesca, por la que se guiaban de la luz del faro de La Entallada, al sur de la isla. Sin saberlo, estos jóvenes se convirtieron en los ‘pioneros’ de esta forma.
El primer naufragio
Además, este año también se han cumplido 25 años del primer naufragio en aguas Canarias. Sucedió en la playa de La Señora, en Morro Jable, Fuerteventura. En el año 1999, una patera se hundió a 300 metros de la costa en la que nueve jóvenes perdieron la vida. Este momento fue clave para que la gente fuese consciente de lo que estaba sucediendo, aunque era el primero que se contabilizó, posiblemente hubieron naufragios antes.
Años después, en el 2009, una patera se hundió a escasos metros de la costa de Los Cocoteros, Lanzarote, en el que 25 de sus 31 ocupantes se ahogaron.
‘Crisis de lo cayucos‘
A principios de agosto de 2005, los servicios de emergencia socorrieron una barca cerca de Agaete. Ésta no era como las anteriores. Se trataba de una más alargada que las tradicionales pateras. Incluso, había aparecido en un lugar extraño improbable para una embarcación que hubiera partido desde Tan Tan, Tarfaya o El Aaiún.
Seguidamente, no dejaron de llegar los migrantes en este tipo de embarcación por lo que la ruta pasó a las 31.678 personas en 2006. Empezó así la «crisis de los cayucos». La Unión Europea invirtió millones de euros para frenar las cifras de la migración en la que obtuvo éxito, ya que durante casi una década se superó dicha crisis.
En 2019 la ruta volvió a avivarse. Los flujos de migrantes del Estrecho de Gibraltar volvieron hacia Canarias, y junto con el Covid, fue una buena ocasión para que más de 2.500 personas llegaran a muelles canarios.
2020 y 2021 fueron los años de Gran Canaria, de Arguineguín, como principal punto de rescate y desembarco. En 2022, la Ruta volvió hacia sus orígenes, a los trayectos más cortos, los de Lanzarote y Fuerteventura, que esta vez se cubrían en barcas todavía más endebles y peligrosas en océano abierto, como son las lanchas neumáticas. Y los cayucos estuvieron desaparecidos durante meses.