Los grupos de la oposición en el Cabildo de Fuerteventura, que suponen 21 de los 23 consejeros de la corporación, barajan la moción de censura como único escenario para desbloquear la situación que sufre la institución tras el cese de los siete consejeros de Coalición Canaria (CC) por parte del presidente, Sergio Lloret, y la marcha de los cuatro miembros del Partido Popular (PP), que ha obligado a que el gobierno insular solo esté conformado por el propio presidente y el consejero Juan Nicolás Cabrera. Esta anómala situación política ha derivado en un bloqueo institucional.
Entrevista a los consejeros del Partido Popular en Fuerteventura
Si bien los partidos mayoritarios en el Cabildo majorero, CC, PP y PSOE, no han confirmado ningún contacto aún entre ellos, todo apunta a que las citadas formaciones ven con buenos ojos la creación de un gobierno de salvación, ante la grave situación en que se encuentra la corporación insular al estar ofreciendo a los ciudadanos un espectáculo bochornoso. Ante ello, estos reclaman un gesto de responsabilidad para salvaguardar la imagen de una administración pública sumida en una grave crisis política.
Desde el entorno del PSOE se asegura que esta operación solo triunfaría siempre y cuando la presidencia del Cabildo sea para este partido. De cerrarse el acuerdo, el bastón de mando sería para María Jesús de la Cruz, que ocupó la segunda plaza de la lista tras Blas Acosta en las pasadas elecciones de 2019. Además, se niegan a aupar a Lola García (CC) como presidenta al considerar que a la misma le fue ofrecida esta posibilidad en su día y los nacionalistas desecharon la iniciativa inclinándose por Sergio Lloret.
El primero en hacer un llamamiento a los partidos de la oposición fue Manuel Domínguez, presidente regional del PP, cuando aún sus compañeros se mantenían en el gobierno insular, ante la situación de ingobernabilidad en que se encontraba el Cabildo majorero. «Llegó el momento de la responsabilidad de los grandes partidos: PSOE, CC y PP para plantear que hacer con un Cabildo que no va a tener gobernabilidad en lo que queda de legislatura, y por mucho que quieran empeñar en designar consejeros no electos».
Además, el presidente insular, Sergio Lloret, encargó a Saro Sarmiento, jefa de los Servicios Jurídicos de la institución, un informe para saber si con dos miembros se pueden celebrar los Consejos de Gobierno.