La asociación de pequeños agricultores de Fuerteventura promueve la comercialización del zumo de granada majorera.
Los pequeños agricultores de Fuerteventura se unen en un novedoso proyecto que cuenta con el apoyo de la consejería de Agricultura y Ganadería del Cabildo de Fuerteventura que lidera Cristobal David de Vera. Se trata de buscar nuevas vías de comercialización ante los tiempos tan difíciles por los que está atravesando el campo majorero, y de paso de promocionar la venta de un producto genuinamente majorero.
Pero al mismo tiempo que se está dando salida a la producción de zumo de tuno indio, los agricultores de la isla aspiran a dar un paso más hacia delante y vender también zumo de granada. Porque de acuerdo con los últimos estudios científicos realizados, como el elaborado por la Universidad de Washington, ayuda a embarazadas con riesgo de parto prematuro a evitar lesiones cerebrales en el bebé.
Del mismo modo, el consumo de zumo de granada previene enfermedades cardiovasculares, y puede ser un medio para combatir el cáncer de próstata y reducir las células de la enfermedad, según un estudio publicado en su momento en la revista Clinical Cancer Research. Investigadores del Centro Oncológico Jonsson de la Universidad de California, destacaron que el zumo frena la proliferación de las células del cáncer de próstata y promueve la muerte de éstas. Además, después de una intervención quirúrgica, el jugo de granada ayuda a reducir el antígeno específico de próstata (AEP) que es el marcador de la enfermedad.
Una cooperativa a nivel insular
Los agricultores han trasladado el proyecto al Cabildo de Fuerteventura para que la empresa, de corte cooperativa, se dedique a realizar el zumo y el envasado, de tal forma que las instalaciones de la Granja de Pozo Negro, como ya hicieron con la creación de una almazara para los productores de oliva, puedan acoger la infraestructura necesaria para la elaboración final. Hay que recordar que el consumo de zumo de granada se está disparando porque se ha comprobado que la granada tiene tres veces más antioxidantes que el vino o el te verde.