Bajo el lema «Canarias tiene un límite», varias manifestaciones han recorrido este domingo las principales zonas turísticas del archipiélago para protestar por los «excesos» del turismo, la masificación, el tensionamiento del mercado de la vivienda y la percepción de que nada ha cambiado, según han expuesto los convocantes.
Seis meses después de la última manifestación masiva el pasado 20 de abril, las movilizaciones han tenido lugar, en el caso de Fuerteventura, en Corralejo, epicentro del sector turístico desde hace décadas y donde han marchado al ritmo de consignas como «Canarias no se vende«.