El diputado del Grupo Parlamentario Nacionalista Canario (CCa), Mario Cabrera González, intervino en el Pleno del Parlamento de Canarias para apoyar una Proposición de Ley (PPL) presentada por los 13 municipios turísticos del archipiélago, para crear un nuevo marco normativo que ayude a estas administraciones locales a lidiar con la presión que supone para los servicios públicos el aumento de turistas en Canarias. “Esta PPL invita a ir adaptándonos a esas demandas que también la sociedad nos va planteando”, aclaró el diputado. Cabrera considera que el aumento del turismo genera un “efecto cascada” .
No obstante, Cabrera ha explicado que dicha circunstancia interfiere también al desarrollo local de municipios aledaños. “Muchas personas que ya no se pueden permitir vivir en los municipios turísticos, pero trabajan en ellos, se han tenido que trasladar a otros por cuestiones como el encarecimiento o la falta de vivienda”, señaló el parlamentario.
Para el diputado majorero se ha de tener en cuenta las circunstancias derivadas del aumento turístico generan un «efecto cascada» en Canarias afectando no solo a los municipios turísticos, sino con consecuencias similares también en los municipios colindantes.
Por tanto, según consideró Mario Cabrera, esto genera necesidades similares en la mayor demanda de servicios públicos, como pueden ser también el transporte, la demanda de guarderías y colegios o la gestión de recursos básicos, como el agua, especialmente problemática en islas como Fuerteventura y Lanzarote, que se enfrentan a una emergencia hídrica”.
“Estos municipios, sin ser turísticos, son un apoyo clave para el sector, porque son los que acogen al mayor número de los trabajadores y trabajadoras de la hostelería canaria”, detalló el diputado nacionalista.
Una ley adaptada a las condiciones actuales de los municipios turísticos
Canarias se ha conformado como un referente turístico a nivel mundial y cada año son más los visitantes que reciben las islas. “Detrás de estas cifras de éxito, existe una realidad compleja y, en ocasiones, desigual, como ya hemos avanzado varias veces en esta Cámara”, relató Cabrera en su discurso.
Esto ha llevado a los 13 municipios turísticos de Canarias a soportar una sobrecarga de infraestructuras y servicios públicos, consecuencia directa de atender a una población flotante que, en muchos casos, supera de manera exponencial a la residente, como ocurre en la mayoría de estos municipios.
De esta forma, se retoma un camino que se ha intentado iniciar varias veces y que cuenta con respaldado legal. Entre ellos, el Decreto 1077/1977 o el artículo 30 de la Ley 7/1985, en las que se expresa la necesidad de crear regímenes especiales para estos municipios. Además de intentos anteriores, de crear el Estatuto para los Municipios Turísticos de 2007, y la Ley de Municipios de Canarias, apuntaban en esta dirección.
“Con esta Proposición de Ley, se cumple con el mandato legal de buscar las herramientas necesarias para gestionar mejor la presión del sector, y al tiempo trabajar en la búsqueda de consenso con el resto de los municipios y cabildos insulares”, concretó el parlamentario majorero.
Tras la toma de consideración de la ley, después de haber sido presentada en el Parlamento, dicha norma iniciará el trámite administrativo necesario, y se dará traslado al Consejo consultivo de Canarias, así como a la Comisión Municipal posteriormente. En este sentido, Cabrera aludió a la necesidad de trabajar siempre en pro del consenso, «especialmente de los organismos locales que son los que se encuentran más cerca de la población» y señaló la importancia de que se escuche también la posición de los cabildos insulares.
Dicha ley contempla el reconocimiento oficial de las singularidades de los municipios turísticos, así como un marco financiero y administrativo adecuado que permita ampliar estructuras municipales, especialmente en cuanto a aumentar el personal y realizar la promoción de un modelo turístico de calidad y sostenible en línea con los objetivos globales de desarrollo sostenible.
Cabrera considera que el aumento del turismo genera un “efecto cascada”