La lava ya ha destruido casi 1.500 edificaciones en La Palma. Por el momento, el material expulsado por el volcán de Cumbre Vieja ha afectado a 656 hectáreas y ha calcinado a su paso 1.458 inmuebles. Estos son los datos que deja la última actualización de Copernicus, el programa de observación de la Unión Europea.
Los datos que muestra el radar se corresponden a ayer, 12 de octubre a las 06:50 horas. De este modo, las hectáreas afectadas por la erupción se han incrementado en un 86,4% en comparación con las 43 horas anteriores. Por su parte, las edificaciones detectadas destruidas experimentan un aumento de 135.
La lava continúa fluyendo lentamente y a esto se le suma la actividad sísmica en la isla que no cesa. En las últimas horas se han contabilizado 20 seísmos, el más intenso en el municipio de Mazo, de magnitud 3,9 y a 37 kilómetros de profundidad.
La situación se mantiene así en el día en que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visita por cuarta vez La Palma desde que el volcán entró en erupción para previsiblemente, exponer nuevas medidas de apoyo a los afectados con cargo a los 206 millones de euros aprobados por el Consejo de Ministros.
El último informe del Departamento de Seguridad Nacional (DSN) señala que el flujo lávico está variando en las últimas horas como consecuencia del derrumbe del cono del volcán, ocurrido el pasado sábado.
Además de la nueva colada norte, existen otras dos lenguas más, según el DSN: la primigenia, que apenas tiene aporte lávico, y otra situada más al sur, que afecta a nuevas construcciones dentro del perímetro de seguridad.
La lava ya ha destruido casi 1.500 edificaciones en La Palma y en las últimas horas las condiciones meteorológicas han favorecido la mejora de la calidad del aire de manera que ayer martes se pudo levantar el confinamiento decretado el pasado lunes que afectaba a 3.500 personas.